viernes, 12 de septiembre de 2014

Capítulo 7.-La rata.

A las 7 y media de la mañana, Elena esperaba el bus que la llevaría a clase con impaciencia. Mientras los demás estudiantes que se encontraban en la parada, se morían de sueño. Lo normal era eso. Era lunes, por la mañana, ¿quien tendría ganas de ir a clase?
Aunque claro, Elena siempre tenía que ser el caso excepcional en todo, o eso creía ella.
El autobús llego con puntualidad, aunque a Elena le pareció haber estado esperando 3 horas a que llegase. Cogió un sitio al lado de la ventana y apoyó la cabeza en ella. Echó de menos sus cascos, pero no quería quedarse dormida o pasarse de parada. Además, con entrar en su propio mundo mental durante unos minutos de viaje le valía.
-No se sintió obligado a nada, Gaston.-Elena se alejó de su propio mundo mental en cuanto la voz de Marta llegó a sus oídos.
-Lo que tu digas. Seguro que habéis quedado tropecientas veces más.-Respondió Gaston a lo que Marta estuviese diciendo.
-Pues no. Quedamos ayer, y porque el quiso, que lo sepas.
El nombre de ''Martin'' apareció en la mente de Elena, aunque podría ser otro chico, ¿no? O eso esperaba ella. No sabía porque le preocupaba tanto el tema, pero siguió atenta.
-Pero ya sabes que...-Empezó a decir Gaston. Elena no escuchó más, o se quedó sorda, o hubo algo que interrumpió a Gaston.-Hablemos más flojo que se entera la morena.-Susurró segundos después.
Genial, habían descubierto que estaba sentada dos asientos más adelante. Elena no sabía como reaccionar así que lo primero que hizo fue cerrar los ojos y fingir dormirse. Después de aquello, escuchó murmureos por parte de los dos. Hicieron bien su trabajo de hablar en secreto, ya que no se enteró de nada más.
-¡Dormilona!.-Alguien la ''despertó''. ¿Martin, Gaston? Abrió los ojos. Enrique.-No sabía que ibas en bus.
-Es el primer día que voy.-Dijo Elena con voz soñolienta (y disimulada). Fingió bostezar. A pesar de no tener ojos extra, sabía que a sus espaldas Marta y Gaston estarían mirándolos.
-Pues te quedan dos paradas, no sé que habría pasado si no hubiese llegado.. Ah, hola.
-Hola.-Contestó Gaston.
Las pocas paradas que quedaban, Elena y Enrique hablaron de los deberes y de las clases que tenían. Elena estaba poco interesada, pero agradecía la compañía de Enrique.
Elena evitó mirar hacia donde estaba Martin, aunque ya lo había visto. Evitó hacerlo porque Marta fue corriendo hacia ese lugar.
-Nayara, te lo dije.-Decía Silvia mientras Elena y Enrique llegaban donde estaba el grupo.
-¿Que pasa?.-Preguntó Elena.
-La rata y Martin, tu compañero de mesa, han vuelto.-Contestó Nayara. Elena puso cara de indiferencia.
-¿Porque ''la rata''?.-Preguntó, aunque le gustaba ese mote.
-Bueno, se maquilla fatal, viste como una princesa Disney y parece borde y pija.-Contestó Silvia.
-Ah.

Minutos después, entraron a clase. Elena tenía un humor bastante diferente a horas atrás  Se había autoconvencido de que Martin habría pasado de Marta. No podía creer que un chico como Martin estuviese con una chica como Marta, y encima más de una vez. Vaya par de idiotas, los dos.
-Hola.-Le saludó Martin. Elena sonrió y fingió estar.. bien. Normal. Como una compañera de mesa. Nada más.
Y es que era así, ella solo era una compañera de mesa. Eso le dolía, no sabia porque, pero le dolía. Pero no podía, ni debía, mostrarlo. Además, el pobre no le había hecho nada, si el quería volver con Marta, que lo hiciese. Allá el.
-¿Te has conectado este finde?.-Preguntó Martin.
Elena se encogió de hombros, aunque sabía la respuesta de sobras. Había estado cada mañana, tarde, noche, conectándose a cada rato para averiguar si Martin se había conectado. Cosa que no había hecho.
-Solo ayer por la noche, creo. He estado fuera de casa.-Mintió. Solo salió a comprar con su madre y su hermano el sábado por la mañana. Los demás días se pasó encerrada en casa, como siempre.
-Yo también. Bueno, hoy te conectaras, ¿no?
-Sí, supongo.
-Guay, podemos hablar por cam.
Elena asintió, y después de aquello no hablaron mucho más que de deberes y de la clase en general. Elena no se atrevió a preguntarle nada sobre Marta, aunque era el tema que más le rondaba por la cabeza. A lo mejor se lo preguntaba por la noche, ya que por cam parece que Martin es más abierto. Además, no tenía que mostrarse interesada.

-Parece que no nos hayamos visto en años.-Dijo Enrique para después mostrar una sonrisa adorable.
Lucia también sonrió y asintió. Estuvo más que de acuerdo con él. Lo había echado mucho de menos, sentía que sin el solo era una chica con un solo camino que seguir, sin la posibilidad de mirar otros.