martes, 19 de marzo de 2013

Capítulo 5.- Segundos.

A las 9 de la noche, cuando Pedro acabó de acabar todos los deberes(incluso los que tenia para la semana que viene), se conectó a su facebook, ya que hacía días que no se conectaba.Tenía unas cuantas notificaciones, pero lo que más tenia era solicitudes de amistad. La primera que aceptó sin dudar ni un segundo fue la de Nayara. Las demás las aceptó como si fueran mensajes del hotmail sin leer, es decir, cosas sin importancia.
Sonrió al ver sus fotos, tenía pocas ya que se ve que se creó la cuenta en junio. Tenía un álbum con fotos profesionales de su madre, hechas con una cámara profesional y retocadas con photoshop. Estaba preciosa, pero a Pedro le gustaba más las que tenia al natural.
Su corazón dio un vuelco cuando vio que Nayara aparecía disponible en el chat.¿Que hace?¿Le abre?Pf, no sabe que hacer.Empieza a sudar.Pero,¿Que le pasa?

No entiende que le pasa con esta chica, Nayara. Desde que la vio, no para de pensar en ella, en su precioso pelo liso, rubio con un toque dorado, su preciosa sonrisa y su acento ingles.La echaba de menos, y mucho.Esperaba que nunca lo cambiasen de sitio.
Pero hay un problema, a pesar de que sienten juntos, Nayara hablaba más con Enrique, que además estaba en diagonal y casi en la otra punta, y no paraban de sonreírse.
Eso a Pedro le molestaba mucho, pero no sabe porque.Le cae mal Enrique, y lo peor, tiene que hablar con el, ya que Enrique está en la misma ''pandilla'' donde se encuentra Nayara.

De repente, suena el sonido del facebook, sonríe y mira, pero luego gruñe para si mismo.Es Enrique, su principal enemigo, o al menos para Pedro.
''hola colega''

¿Colega?¿Este de que va?¿Se cree que ya es amigo de todo dios?

''perdona k estoy con un amigo y se pone a hablar con todos. adiós'

Pedro sonríe sarcásticamente y escribe ''dew''.''Este tío es idiota''Piensa para si mismo. Después vuelve a sonreír para si mismo, y piensa en como conseguir a Nayara, ya que se nota que Enrique siente algo por ella.
Aunque, tal vez no lo haga para fastidiar a Enrique, abre el chat de Nayara y pone 'hola'.

Nayara se estaba peinando cuando alguien le habló en facebook. Abrió la ventana, ansiosa, pero suspiró cuando vio que era su compañero Pedro.Ella tenía ganas de que fuese Enrique, y si no fuese porque Enrique estaba con un amigo, ella le hubiese abierto hace horas.
De todas formas, su compañero Pedro era muy simpático y le podría ayudar con las matemáticas. Así que le respondió enseguida y esperó a que el dijera el típico ''¿Que tal''.


-Tío, ¿Que hago?
-Pero ábrele ya. No se a que coño esperas.
-Se pensará que soy un pesado.
-Anda, déjame.

Mikel cogió el portátil de Enrique, pero antes de que pudiera escribir algo, Enrique le quitó el portátil.

-Así no vas a conseguir novia en tu vida.Tu mismo.-Dice Mikel, encogiéndose de hombros.
-Me la suda que no sea mi novia.. solo quiero hablar con ella.
-¿De que?

Enrique se queda callado, no lo sabe, solo sabe que quiere hablar con ella, aunque sea a través de una pantalla del ordenador, quiere saber algo de ella, si esta bien.. Quiere estar más tiempo con ella, si se sentarán juntos en clase..Pero ese puesto lo ocupa su.. compañero, Pedro.
Tampoco es que quisiera cambiarse de sitio, bueno, si quería, pero no estaba mal con Lucia. Era una chica muy simpática, le caía muy bien y también quería verla, de hecho, pensaba quedar con ella. Pero no es lo que le pasa con Nayara. Nayara es diferente.

-Eo.
-Eh.. perdona tío.. esta chica..
-Parece ser que te has enamorado.

Enrique miró a Mikel con una cara de lo más sorprendida. ¿Tendría razón su amigo? El jamás se había enamorado. Normal. ¡Solo tenia 12 años! Pero ya no era un niño pequeño.. Hace 3, casi 4 meses abandonó la primaria.. Ahora ya está en la secundaria. Aunque la acabe de empezar. Tal vez su madre tenga razón, cuando empiezas primero de la ESO, todo cambia,tu, tus amigos, todo a tu alrededor. Pero Enrique no pensaba que fuera a cambiar todo tan de golpe.

-No me he enamorado de nadie y ni pienso hacerlo.
-Es que tienes 12 años todavía, pero cuando uno empieza la ESO..
-No empieces como mi madre.
-Yo cuando empecé la ESO hasta ahora, me enamoré y estoy enamorado de una pava. Y jamás había sentido algo así.

Enrique sonrió con ironía. Su amigo a veces era demasiado exagerado, aunque era verdad eso de que estaba enamorado, pero, estar enamorado de alguien durante 3 años.. No.

-Parece ser que alguien te ha abierto.

Nayara le había escrito a Enrique: ''hola, has hecho los deberes de mates?;)''


Gastón paseaba de la mano de Dayana por las calles. El le sonreía y le daba besos en el pelo, pero Dayana no respondía con mucho animo.

-¿Que te pasa?
-Nada.
-Ya, por eso estás tan borde.
-No me pasa nada.
-No mientas.
-No miento.

A Gastón le quedó más que claro que a su novia le pasaba algo, cuando ella se soltó de su mano con brusquedad.
-¿Que he hecho ahora?
-¡Nada!
-¿Entonces?
Dayana suspiró y levantó la vista del suelo y lo miró.
-No has venido a verme durante estos días.
-¿A donde?¿Al colegio?
-Sí.
-Sabes que no he podido. Con la ESO todo es más difícil y..
-Llevamos 3 días de clase, no creo que por 3 días ya te hayan puesto miles de deberes y miles de exámenes.
-Exámenes no, deberes sí.
-Pf.

Gastón miró hacia el cielo y suspiró, que difícil era su novia a veces. Bueno, a veces no, casi siempre, era muy cabezota y siempre encontraba la razón más estúpida para discutir.
Pero a pesar de todo, el estaba muy locamente enamorado de ella, la quería como a ninguna otra chica. Y cada vez que piensa que esa chica a la que quiere tanto es su novia, sonríe sin querer.
-Dayana, hoy te he venido a ver.
-Si, y menos mal.
-¿Cuando quieres que te vaya a ver?

Dayana fue ahora la que suspiró.

-No se, es que.. Pf, lo siento, ¡Perdóname! ¿Vale? Es que ahora te echo muchísimo de menos por el recreo, quiero estar contigo y no puedo..
-Yo también te echo de menos.-Le acarició la mejilla.-Y prometo visitarte todos los días, aunque solo estemos juntos un cuarto de hora.
-Con solo verte, me vale.
-Iré a verte, pero no puedo prometerte estar mucho tiempo.
-Lo sé..Gracias.
Gastón no entendió muy bien su gratitud, pero se calló cuando los labios de Dayana rozaron los suyos.
-Eres el mejor novio del mundo. ¿Lo sabías?
-Y tu la mejor novia.
Los dos se sonrieron, se cogieron de la mano y siguieron su paseo en una tarde romántica.


Tonta. Estúpida, idiota. Eso es lo que sentía Nayara después de escribirle a Enrique.
''Has hecho los deberes de mates? ;)'' ¡Pero que estúpida Ni siquiera habían puesto deberes de mates. Y encima con la cara de '' ;)'' que suena muy borde.. bueno, para el no sabe como sonaría, pero pfff, y además, Enrique le había dicho que estaba con un amigo. ¡La tomará como plasta! ¿Que hace?
Leído. Mierda, ya esta, lo ha leído  Es el final. Que asco de todo. Encima no le responde. Bf, bueno, ha aparecido hace apenas unos 10 segundos lo de ''leído'' pero ni siquiera sale, ''escribiendo''.
15 segundos, 20, 25. Mierda. ¿Porque no le contesta?A lo mejor lo ha leído su amigo, quien sabe. Y además, a veces aparece lo de ''leído'' cuando la pantalla está abierta y también la ventana, pero a lo mejor Enrique no estaría delante del ordenador y.. ¡Eh!¡Escribiendo!Dios, cuanto escribe.
Nayara está de los nervios, no para de morderse las uñas y tocarse el pelo, y se ríe, se ríe de lo nerviosa que está.¿Que le pasa?No lo sabe, pero ese chico la vuelve loca.


-Quien juega con fuego, al final se quemará..- Susurra Lucia, mirando a través de la ventana el paisaje, aunque sus pensamientos no tenían nada que ver con este.

-¿Se puede saber que te pasa?.- Preguntó Natalia entrando en su habitación. Lucia estaba tan centrada en sus pensamientos que se asustó muchísimo al verla, y casi se cae.- Hoy no estas aquí, ¿Eh?
-Déjame en paz.
-Uy, uy, algo te pasa. Apuesto a que el tío del bus tiene algo que ver.
-Natalia, déjame ya, me manchaste la camiseta el otro día y por tu culpa hice el ridículo  y encima ahora me molestas con esta chorrada. Pesada que eres hija.
Natalia rió, pero al ver la expresión de su hermana decidió callarse y estirarse en su cama, se colocó los cascos y empezó a escuchar música.
-´Te voy a retar a una apuesta.-Dijo Natalía mientras pasaba las canciones de su Mp3 para poner su favorita.
-¿Que dices tu ahora?.-Susurró Lucia, recostando su cabeza en el borde de la ventana.
-Si no te has enamorado del tío del bus durante tres meses, te tendré que dar lo que tu quieras, si es todo lo contrario, me tendrás que dar a mi lo que yo quiera. ¿Va?
Lucia miró a Natalia con una expresión de asombro y repugnancia a la vez.
-Tal vez eres tu la que esta enamorada de Enrique, pff.
-Bueno, ¿A ti no te mola, verdad?
-No, y nunca me molará.
-Pues entonces, ¿Que problema tienes en aceptar la apuesta? Sabes que nunca te molará, ¿No? Pues ya está, evidentemente ganarás tu.
Lucia sonrió con ironía, y luego asintió.
-Vale, acepto la apuesta, más vale que cumplas el trato cuando gane.
Y aunque no lo quería reconocer, Lucia tenía dudas de que si realmente ganaría ella la apuesta.